No me quieras mucho quiéreme bien
No me quieras mucho, quiéreme bien.
Es muy complicado salir de una relación tóxica. De hecho hasta que no lo he vivido en mis propias carnes… No sabía lo complicado que era salir de ella.
Me ha costado mucho tiempo ver algo positivo de esta experiencia. Pero incluso los golpes de la vida, siempre nos enseñan a levantarnos con fuerza y seguir adelante.
Era muy fácil aconsejar cuando eran otros los que pasaban por ello. Lo veía clarisimo, sal corriendo de ahí, no te aporta nada bueno seguir…

Pero cuando tú mismo eres el protagonista de esa historia, te olvidas de todos aquellos consejos que regalabas y tan sencillos te parecían de aplicar.
Mientras estemos vivos, todo es posible. No me quieras mucho, quiéreme bien.
He aprendido, que no todo el mundo sabe querer con pureza aunque lo intente.
Hoy en día es muy complicado encontrar a personas que sepan querer de verdad.
Creía que el amor todo lo podía, porque creí en unos sentimientos que pensé que eran correspondidos. Pero no fue así.
Jamás supo amarme como yo lo amé, aunque mentiría si dijese que al principio no lo intentó y me hizo pensar que el sentimiento era compartido.
No lo puedo culpar por el final de nuestra relación. Desprecio a desprecio, mentira a mentira le dejé de amar. Lagrima a lagrima llegué a odiarle más de lo que un día llegué a quererle.
La desconfianza era parte de mis días por sus mentiras, me convertí en una persona horrible por la desesperación, me hundí en la miseria pero no llegué a destrozar del todo mi vida.
He aprendido que eso no fue amor, y que si en algún momento de mi vida vuelvo a vivir algo similar, no quiero perdonar una primera vez, puesto que vendrán más.
El amor no son mentiras, no es egoísmo. No me quieras mucho, quiéreme bien.
Ojalá nunca tuvieses que aprender nada de una experiencia así, porque no tuvieses que ser el protagonista de ella.
Por suerte hoy te puedo asegurar que es posible salir de una relación tóxica, volver a brillar y tener ganas de vivir.
Sabes que se acabó y lo único que eres capaz de sentir es felicidad. No me quieras mucho, quiéreme bien.
El tiempo todo lo cura, absolutamente todo, y al igual que dejas de amar, dejas de odiar. Lo contrario al amor simplemente es la indiferencia.
Eres libre el día que escuchas el nombre de esa persona y no sientes absolutamente nada, ni bueno, ni malo, porque ya no forma parte de tu vida. …
Ya no tengo creencias sobre el amor ni idealismos, quizá es otra lección que aprendí sobre esta relación.
Mi cabeza no está repleta de pájaros y mariposas volando sobre los poderes del sentir.

Quizá nunca más me vuelvo a enamorar y no me asusta esa sensación, muchas personas mueren sin haber amado con todo su corazón. Yo si lo descubrí cuando pensé que no me volvería a ocurrir.
Jamás podré tener una relación por miedo a estar sola porque adoro mi soledad, mis momentos de intimidad.
Si no amo de verdad con todas mis fuerzas, no quiero saber nada sobre el amor, porque no lo necesito para vivir.
Amo mi vida, todo aquello que soy capaz de conseguir cuando depende de mi. Adoro mis normas y todo aquello que tengo la oportunidad de saborear sea bueno o malo.
No me quieras mucho, quiéreme bien.
No sé que ocurrirá mañana, pero quiero seguir viviendo en paz.
La simpleza de vivir los momentos como van viniendo, de sentir calma y bienestar, de no esperar nada y dejar que la vida sea quien te vaya sorprendiendo.
Mi certeza es vivir el momento e improvisar.
¿Alguna vez has tenido una relación tóxica?
-Sara J Pajares-
#Locapormitutú
Comments ( 60 )