Vamos a hacer una similitud entre tu comportamiento a la hora de elegir pareja y el coste de oportunidad. El coste de oportunidad también es el coste de una inversión que no se realiza. Así, este coste, tiene que ver con la toma de decisiones y con lo que nos cuesta renunciar a algo cuando decidimos. Imaginemos que vamos a comprarnos un coche en similitud a que vamos a elegir pareja, y nos gustan varios modelos, aunque finalmente nos quedamos dudando entre dos, un descapotable rojo metalizado y un 4x4 azul. Si elegimos el primero, el coste de oportunidad es haber tenido que rechazar el 4x4, y viceversa. Igualmente, en el tema de relaciones sentimentales, al elegir un pretendiente en vez de otro el coste de oportunidad es haber rechazado a uno de ellos y no saber que tal nos hubiese ido. Vamos a quedarnos con el descapotable rojo!. Cuando hemos tomado una decisión al principio todos estamos muy ilusionados con nuestro nuevo coche o pareja sentimentalnos gusta mucho!! Sabemos que ese coche no nos conviene.
Muchas personas experimentan una gran dificultad para encontrar pareja. El ser humano es un animal social por naturaleza, tenemos la necesidad innata de estar acompañados por otras personas y establecer vínculos sociales y afectivos. Así, aunque no todas las personas tienen las mismas necesidades afectivas, por lo general tendemos a buscar cariño. Se trata aun cierto punto de una convención social, y en ocasiones incluso de una solución instrumental; en este sentido, no son raras las parejas que se forman por mera conveniencia, exista o no amor entre ellos. Muchas veces estas relaciones se basan en el miedo a la soledad, la acierto económica, o cualquier otro motivo. Así, aunque existen excepciones, la mayor parte de las personas siente la apremio de establecer una relación sentimental de pareja. Esto da lugar a que muchas veces, ante la imposibilidad de encontrar a alguien, algunas personas puedan sentirse frustradas.
Por Alicia Pérez Durante la vida matrimonial la pareja se va descubriendo a sí misma. En el día a día de su convivencia los esposos aprenden a acoplarse el uno al otro y también encuentran la forma de pulir asperezas. Juntos van escogiendo los valores que van a abrazar y deciden cómo los van a vivir. Con mucha frecuencia, creyendo evitar con eso conflictos, las parejas cometen el error de callar sus insatisfacciones.
Sin embargo, a muchas personas les resulta difícil encontrar a alguien para ejercer un idioma. A continuación, te ofreceré consejos para conocer extranjeros en tu ciudad y realizar intercambios de idiomas para mejorar el que estés estudiando. En todas las ciudad hay estudiantes extranjeros, viajeros y residentes que viven cerca de ti, los cuales normalmente necesitan conocer gente en la localidad. Afortunadamente, para estudiantes de idiomas viviendo en ciudades cosmopolitas y también para los que no, internet viene a su rescate, esta vez como aire para conocer gente.