No puedo, tengo que ir a la iglesia. Vamos, no nos hemos visto por mucho tiempo. Toma esto, no quiero que te enfermes, pequeña. Hace mucho frío afuera. Me debes 5 dólares. Hasta que no lo vea sentado a la mesa, no te debo nada. Estoy preocupada.
Corregiremos el error y les enviaremos por correo el archivo enmendado. Muchas gracias. Cuarta serie Tres cuestiones históricas sobre Pizarro. Es verdad que el acrofobia del literato, en esta capital del perulero, a nadie le produce para el plato; pero, en conciencia, confesarte quiero que da a veces blasón, y es fortuna la de no ser un literario cero. Hijo soy de mis obras. Pobre cuna el año treinta y tres meció mi infancia; pero así no la cambio por ninguna. Yo sé, pues me lo dicen a porfía órganos cien, que el género en que escribo en América diome nombradía.