Venga, adelante Seguía diciéndose mientras alargaba su periodo de relax Eso era lo que pensaba, mientras no se daba cuenta de que toda la exclusividad que él emanaba era una mentira, una caratula para atraer, de la misma manera que una flor con sus colores atrae a las bellas mariposas. Lo peor es que tal sujeto no se de cuenta en si mismo de la farsa que realmente constituye.
En ella, una descarga eléctrica dotaba a Mel del superpoder de leer la mente de las mujeres y el pobre se volvía majara con tanta información, claro. La lavadora no para. Y dale, y venga, y toma. Y yo nací con cerebro de mujer, pero Mel no, y de todos es sabido que este revoltijo femenino es algo imposible de empapelar para un coco masculino. Le doy al seso sin orden ni actuación. Ya lo has probado, tonta del culo. La lían parda, discutís, te pones del hígado.
Juntos nos. Divertiremos y haremos todos los pecados sexuales que tu pícara inteligencia y la mía lleguen a imaginar. Soy una. Linda pelinegra dispuesta a darte el mejor trato de novios. Quiero eficacia. Atenderte como el rey que eres y hacerte arrepentirse todas esas cositas que baza has buscado en la camita. Te ofrezco.